lunes, 25 de agosto de 2014

Ocaso

Necesito sentir tu olor en mi piel
Quiero ser alquitrán sellado en tu entrepierna
Encadenarme por siempre a tus caderas
Succionar tu sabor a hiel y a miel

Voy a provocar hematomas en tu cuello
Voy a mezclar tu savia y mi saliva
Enredar mi mano en tu cabello
Hacer que la mundanidad reviva

Son uno mis manos y tu cintura
Es el poder de sentirte viva
En mi boca, el sabor de tu amargura
Y en la tuya mi sabor arriva

Se pierden los limites entre dos cuerpos
Se tornan fáciles los rudimentos
El placer es un hechizo
No te opones, no resisto.

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